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domingo, marzo 02, 2008

LA CRISIS COLOMBIANA CON VENEZUELA Y ECUADOR

Es flagrante, la clara intervención de Venezuela en los asuntos internos de Colombia, que rompe una tradición diplomática entre los países andinos de mas de cien años. La muerte de Reyes, es apenas el resultado lógico de un conflicto en donde las partes involucradas se someten a las consecuencias de una guerra de más de treinta años y cuyo escenario natural han sido las selvas Colombianas, especialmente las zonas de frontera, por lo que resulta inexplicable la reacción del presidente Chávez, más cuando es evidente que el conflicto desbordo el marco geopolítico que le dio origen. La Farc ha secuestrado, asesinado, traficado, torturado y representa a la fecha la peor amenaza a la institucionalidad, es un hecho que desconoce en absoluto el ideario que le dió nacimiento. Las fuerza militares colombianas han realizado las peores alianzas con el paramilitarismo y cometido crímenes que nos avergüenzan; de igual manera, algunos sectores de la sociedad han conestado con estas practicas, aspectos que resumen el manejo especial que requiere el conflicto nuestro. El papel del presidente Chávez, cuando fue elegido mediador, de manera absolutamente equivocada por el presidente Uribe, era obtener la devolución de los injustamente retenidos. Desde el principio ha desbordado su papel, asumió posiciones por encima de la mediación y ahora se ha querido perpetuar en el propósito muy a pesar que el gobierno de Uribe lo removió de sus responsabilidades, confundiendo su ayuda con los objetivos de su política bolivariana variopinta, que de continuar, generará una guerra en la región de nefastas consecuencias, pues no es difícil reconocer que el mandatario ve a la Farc mas como un aliado y un soporte al modelo político que desea imponer para Latinoamérica, que como un interlocutor del conflicto. La Decisión del presidente Chávez de retirar los embajadores y militarizar la frontera es absolutamente delicada. Peor la reacción del presidente Ecuatoriano, de hacer lo mismo, que demuestra lo dubitativo y falta de carácter, actuando tristemente al son de los pronunciamientos de su vecino . Está claro, que el gobierno Colombiano en cabeza del presidente debe manejar la situación con guantes de seda, sin demostrar ninguna debilidad al respecto, llamar a consulta a la comisión asesora de relaciones exteriores y hacer una brigada diplomática que involucre a los principales gobiernos de la región. En estos momentos, sin importar si estamos de acuerdo o no con su política interna, los colombianos debemos rodear al presidente de la república y esperar que la situación se resuelva de la mejor manera.